El mar se complace
de arrimar al silencio susurros
para hacerlo paisano
de la ternura
Pero algunos silencios
tambien valen
para callar al mar
El mar parte el aire
en dos porciones
bañadas por la inquieta
frescura
Pero algunas humedades
del cuerpo
climatizan mejor
las habitaciones
El mar desesperado
se embriaga de arena
y llena infancias
se escurre por las rocas
deja
la plata salada
de sus entrañas
Nuestros ombligos
dulces
estan rellenos
algunas veces
de la plata salada
que el mar dejó
en otros ombligos
domingo, 24 de agosto de 2008
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